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La economía va a las urnas más recuperada pero con sabor a poco

07 Julio 2017

La economía de la era M llegará a las elecciones de octubre mejor que en 2016, aunque con una suba acotada en el consumo y el empleo, las variables económicas que más impactan a la hora del voto.

La economía en octubre podría estar creciendo incluso a más del 4%, impulsada por el agro, la construcción y el transporte y las comunicaciones, pero también por la industria, que llegaría expandiéndose cerca del 3%. A causa de los insumos, las importaciones estarán aumentando más que las exportaciones.

El gasto público llegará creciendo levemente con respecto al PBI, con menor peso de los subsidios y mayor de la obra pública y las jubilaciones. La inversión privada seguirá expandiéndose, aunque muchas decisiones aguardarán el resultado de los comicios. La inflación continuará bajando, pero con subas puntuales y no tanto como para cumplir la meta del BCRA. El dólar estará en torno a los $ 18 para fin de año, es decir, subirá bastante menos que la inflación, que superará el 20%. El crédito, que ya crece con fuerza, cobrará más impulso si bajan las tasas. Con los salarios ganándole a la inflación, el consumo estará creciendo, pero menos que el conjunto de la economía.

El empleo se seguirá recuperando a ritmo débil. Cuánto incidirá la economía en el voto está por verse, pero el resultado electoral sí afectará a la economía, ya que probará o no la continuidad del cambio y definirá inversiones. Además, un resultado negativo para el oficialismo en las urnas afectaría la cotización del dólar, advierten los especialistas.

"La economía aportará, pero débilmente, a la cosecha de votos del oficialismo en las elecciones, de forma que factores extra económicos jugarán un rol importante para definir el resultado de los comicios", considera Marcelo Capello, presidente del Ieral, quien además prevé que la desaceleración de la inflación, de 32,5% en enero a 22% ó 23% en agosto, sea usada por el Gobierno para seducir a los votantes.

Según el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del BCRA, la inflación este año será de 21,7%; el crecimiento, de 2,7%; y el dólar terminará a $17,60.

"Es difícil saber cuánto del crecimiento de la economía impactará en el voto. La confianza del consumidor, si bien está en niveles altos, no tuvo una buena performance en los últimos meses", considera Eric Ritondale, economista senior de Econviews.

"La actividad comenzó a dejar de lado la recesión en el tercer trimestre del año pasado, aunque a una velocidad muy lenta, lo que genera una sensación de debilidad importante en la gente", apunta Matías Surt, director de la unidad Economía de INVECQ.

La mejora de la actividad será "más bien estadística, ya que se estará comparando con un tercer trimestre de 2016 muy malo, con sabor a poco en la calle", evalúa Soledad Pérez Duhalde, gerente de Análisis Económico de Abeceb. Aquí, las variables que hay que mirar:

1. PBI: creciendo al 4%

A octubre, la economía llegaría creciendo al 4% interanual o más, según Ritondale, que anticipa que el agro tendrá un alza cercana al 10% interanual y que la industria, que ya crece en términos interanuales, va a estar más cerca del 3% para ese entonces.

"El nivel de actividad general en el tercer trimestre se encontrará 4% por encima del de 2016, pero menos de 1% por encima del de 2015", enfatiza Capello. El agro en el primer trimestre se ubicó 4% por encima de igual período en 2016, pero un 4% por debajo del primer trimestre de 2015. Con respecto a 2015, la industria se ubicó 3% por debajo, y 2% por debajo del nivel de 2016.

"Los sectores más golpeados continuarán siendo la industria y el comercio, que con llegar a las elecciones con una tasa interanual acumulada del 0% ya sería una buena noticia", considera Surt, quien también prevé una tasa anualizada para el tercer trimestre superior al 4%. En tanto, para Abeceb, la economía crecería en torno al 3 o 3,5% interanual en ese entonces.

2. Consumo: variable rezagada

El consumo será la variable más rezagada. La mayor incidencia de los servicios públicos deja menos ingreso disponible para consumir. Pero, además, los indicadores tradicionales no capturan la migración de canales hacia la venta online o en mayoristas, donde el consumo crece, ni las compras en viajes al exterior.

En el primer trimestre, el consumo privado creció con respecto al cuarto trimestre del año pasado 1,4% y 0,9% en términos interanuales. Con la recomposición de los salarios reales, INVECQ espera que el consumo tenga una expansión en 2017 en torno al 2,5%. "Si bien las ventas en supermercados y shoppings aún muestran números negativos en cantidades, otros tipos de consumos, como el de motos y autos, crecen 40 y 50%", señala Surt.

Según la masa salarial y la recaudación por IVA, el consumo ya está creciendo interanualmente, aunque levemente, sostiene Ritondale. Hacia las elecciones, el crecimiento se ubicará más cerca del 2-3% interanual, aunque algunos canales, como los shoppings, seguirán sin buena performance. En 2017 el consumo terminará creciendo aunque levemente por debajo del PBI, sin recuperar aún los niveles de 2015.

3. Inflación: en baja pero...

"La inflación se verá favorecida porque no habrá ajustes de tarifas hasta después de las elecciones. No obstante, en julio las noticias no son buenas por los aumentos de prepagas y naftas", afirma Ritondale. La inflación anual en el área metropolitana de Buenos Aires cerrará en torno a 22% a fin de año, según Econviews. Es decir, bajará pero bastante más despacio de lo que desea el Banco Central.

Según INVECQ, la inflación mensual debería ubicarse entre el 1 y el 1,5% durante el período eleccionario, llevando así a una inflación interanual hacia fin de año en torno al 21/22%, la tasa de inflación más baja de la última década a excepción de 2009.

"La inflación llegará a octubre en niveles anuales en torno al 21,5%, muy por debajo de los niveles de 12 meses antes, cuando superaba el 40%, pero también sin posibilidad de llegar a la meta de 17%. A fin de año impactará el ajuste de gas ya anunciado, y en noviembre entraría en vigencia el ajuste del boleto de colectivo", sintetiza Pérez Duhalde.

4. Salarios, con algo de oxígeno

Los salarios, en cuanto a poder de compra, habrían caído durante el primer trimestre un 2% en términos interanuales. En el segundo trimestre, a medida que diversos acuerdos fueron forjándose, la evolución salarial real ingresó en un terreno positivo, creciendo un 1,1% interanual.

"Para el tercer trimestre, la recuperación económica y la tendencia a la baja de la inflación podrían generar un crecimiento salarial del 4,2% interanual en términos reales y en caso de que la macroeconomía siga mostrando una tendencia favorable, el cuarto trimestre podría completar otro período de expansión para los salarios reales, con una evolución interanual del 5,8%", anticipa Capello. En suma, Ieral prevé que el promedio de evolución salarial en términos reales a lo largo de 2017 se encuentre un 2,3% por encima de 2016.

En el empleo registrado, juegan dos factores: la ejecución de negociaciones salariales en dos o tres tramos, sumado a los acuerdos que vencen en los próximos meses; y la implementación de cláusulas de gatillo como resguardo sobre el acuerdo salarial alcanzado.

5. Dólar para arriba

Econviews espera un dólar de $ 18 a fin de año y con más volatilidad con respecto a principios de año, aunque tampoco tanta como la de las últimas jornadas. "Su valor a fin de año también dependerá del resultado de las elecciones, sobre todo en la provincia de Buenos Aires. Los inversores estarán pendientes de ese resultado para evaluar la sostenibilidad de la agenda de reformas", advierte Ritondale.

"El dólar es una variable tradicionalmente sensible a los períodos de elecciones, por lo que podremos tener alta volatilidad en los próximos meses. De hecho, una parte de la suba que se ha visto en estos días responde probablemente al cierre de listas, la oficialización de los candidatos y las primeras publicaciones de encuestas", aporte Surt.

INVECQ prevé, en un escenario favorable para el oficialismo, un dólar en torno a los $ 18 para fin de año, aunque en el medio anticipa volatilidad. "Un tipo de cambio a $ 18 para fin de año implica un avance interanual de apenas el 12%, con una inflación que estará seguro arriba de 20%", resalta Surt.

6. Las impo le ganan a las expo

Las importaciones seguirán creciendo por encima de las exportaciones, aunque las ventas al exterior comenzarían a repuntar lentamente, pasado el efecto de las liquidaciones récord de 2016, tras la salida del cepo, según Econviews, que además destaca el crecimiento de las exportaciones industriales, impulsado por Brasil.

"El dinamismo de las importaciones es una buena señal, ya que gran parte son inversiones e insumos para la producción", sostiene Ritondale, quien anticipa que 2017 cierre con exportaciones creciendo 6% e importaciones, cerca de 12%.

"Las importaciones crecerán por encima de las exportaciones en el año, por la recuperación económica", coincide Surt, quien considera que esto puede ser problemático a mediano plazo. Si bien el déficit comercial no constituye un problema ahora, es necesario dinamizar las exportaciones y balancear este desequilibrio, evalúa. En cantidades, las exportaciones están estancadas en el nivel de 2005 mientras que las importaciones se duplicaron.

7. Crédito en crecimiento

"El crédito hace varios meses que está creciendo en términos reales, incluso parte del crédito al consumo, en el segmento de créditos personales", destaca Ritondale. En tanto, el crédito con tarjetas viene rezagado y afectado por el fin de las llamadas "cuotas sin interés".

Los segmentos más dinámicos son los créditos comerciales a empresas, los hipotecarios (aunque la escala que tienen aún es pequeña a nivel macro) y los personales, que van a seguir movilizando el crédito. "Esperamos que el crédito siga creciendo y a fin de año esté aumentando en torno al 30% anual y por encima del PBI. Con todo, este año el crédito privado crecería levemente por encima del PBI", anticipa Ritondale.

"El crédito en términos reales está creciendo con fuerza, tanto en pesos como en dólares. La baja de la inflación para los próximos meses debería corresponderse con una disminución de las tasas que dé más impulso al crédito", prevé Surt. La tasa de referencia del BCRA, a partir de la cual se determina el costo de tomar créditos, en junio estuvo cerca del 26%, unos siete puntos menos que un año atrás, enfatiza Capello.

8. Más gasto público

El gasto público inició el año creciendo cerca del 40% interanual, pero ya en mayo creció 23,6%, mientras que se aceleran los gastos vinculados a algunas obras públicas para lograr resultados visibles para la población (en transporte, educación, agua potable y alcantarillado), explica Capello.

"Al gasto público lo vemos creciendo levemente con respecto al PBI este año, aunque cayendo el peso de los subsidios y creciendo el de la obra pública y las jubilaciones, por la Reparación Histórica y por la Ley de Movilidad, ya que las jubilaciones siguen la inflación de 2016", describe Ritondale. En tanto la recaudación también crecería levemente con respecto al PBI por el crecimiento económico y el Gobierno cumpliría la meta de déficit primario de 4,2%.

"El gasto público está bastante jugado y llegará a la elección creciendo en torno al 25% interanual. No creemos que haya aceleración del gasto pre-electoral como en ciclos electorales previos, aunque puede haber alguna aceleración de la obra pública", sostiene Pérez Duhalde.

9. Empleo

"El empleo formal hace 11 meses que crece en forma consecutiva y esperamos que continúe haciéndolo en los próximos meses, aunque a un ritmo pausado, que no alcanza todavía para que la tasa de desempleo disminuya sostenidamente, aunque sí alcanza para que se mantenga relativamente estable", afirma Ritondale.

"El empleo se está recuperando de la caída de 2016 a ritmo débil y ésta puede ser quizás una de las variables que juegue menos a favor del Gobierno en las elecciones, fundamentalmente en el Gran Buenos Aires", considera Surt.

En el tercer trimestre, Ieral prevé que se sostenga la expansión del empleo, a un ritmo del 1,2% con relación al segundo trimestre del año. "Para octubre, la economía habría generado unos 174.000 nuevos empleos en el ámbito privado formal, con relación al empleo privado registrado en el cuarto trimestre de 2016; lo que implica una expansión del 3% con respecto a ese período, previsión que podría ampliarse al 4% interanual si el proceso de crecimiento se extiende a lo largo del cuarto trimestre del año", sostiene Capello. Así podría esperarse que interanualmente para el último trimestre del año el total de personas ocupadas (incluyendo informales y cuentapropistas) se haya incrementado en unas 260.000 en todo el país.

10. La inversión, expectante

La inversión total llegaría a las elecciones mostrando en el tercer trimestre subas interanuales del orden de 10/11%, principalmente traccionada por la inversión pública, la construcción y algunos proyectos de infraestructura, según Abeceb.

"Los números de la inversión comienzan a ser bastante positivos", según Ritondale: por la expansión de la construcción, que ya está recuperando el terreno perdido en 2016, y por la inversión en equipo durable, que en 2016 creció en volumen y está creciendo hoy en torno al 10% anual (20% en equipo importado). Por otro lado, la IED, que en 2016 fue de unos u$s 5,8 mil millones, creció 30% anual en el primer trimestre y se ubicaría en torno a los u$s 10 mil millones en todo el año.

Así, "la inversión crecerá cerca de 10% en todo el año, aunque no habría que descartar sorpresas positivas en el último trimestre, sobre todo si el Gobierno obtiene un buen resultado en las elecciones", concluye Ritondale.